Álbumes ilustrados sobre plantas, jardines y jardineros
Lo confieso: soy una apasionada de las plantas, las flores y los árboles, ya sea en su versión más salvaje o en su lado más ajardinado. Por eso voy siempre con la antena puesta para detectar álbumes ilustrados sobre estos temas, que combinen buenas historias de amor hacia la naturaleza con deliciosas ilustraciones de vegetación. Y estos son los que he encontrado hasta la fecha, protagonizados todos ellos por auténticos locos de la jardinería que mientras proyectan sus jardines y cuidan sus plantas, en realidad están soñando con un mundo mejor.
1. El jardín curioso, de Peter Brown, publicado por Takatuka.
Me parece un libro doblemente atractivo porque, además de presentar una buena historia y una magnífica ilustración, está inspirado en un lugar y una historia real que el propio autor narra en una nota al final del libro.
En la parte oeste de Manhattan hay una antigua línea de ferrocarril elevada, llamada High Line. Sus trenes retumbaron por encima de las calles de la ciudad durante décadas, pero en 1980 la High Line fue cerrada y olvidada. Sin gente ni trenes en su camino, la naturaleza tuvo vía libre para redecorar el lugar a sus anchas. Con el paso de los años, la grava y las vías oxidadas dieron paso, poco a poco, a las flores silvestres y a los árboles. Y si hoy miramos las vías, veremos un exuberante jardín que dibuja curvas por encima de las calles y entre los edificios.
A través de este pequeño fragmento de la historia de la ciudad de Nueva York, el autor puso en marcha su creatividad e imaginación para crear este precioso álbum ilustrado:
¿Qué ocurriría si una ciudad entera decidiese cooperar realmente con la naturaleza? ¿Cómo cambiaría la ciudad? ¿Cómo podría empezar todo?
El libro comienza en una ciudad completamente gris y triste en la que no existe ni un solo rastro de vegetación.
Liam, el protagonista, es un niño inquieto al que incluso en los días de lluvia puedes encontrar recorriendo y explorando la ciudad. Un buen día encuentra un acceso para subir a las vías abandonadas que atraviesan toda la ciudad y allí descubre unos minúsculos brotes de flores silvestres, los primeros que ve en aquella ciudad tan desangelada.
Con la ayuda de los cuidados de Liam, el jardín va creciendo y explorando todos los rincones de las vías.
El invierno llega y cubre de nieve toda la ciudad, haciendo también mella en el jardín. Pero Liam sabe esperar pacientemente y con la llegada de la primavera nuevos jardineros se unen al cuidado del jardín hasta tal punto que este se extiende por absolutamente todos los rincones de la ciudad.
El álbum se cierra con la misma imagen panorámica de la ciudad de la primera página, sólo que ahora es una imagen bastante más verde y alegre.
Después de leer este álbum os animo a descubrir con vuestros hijos esos “jardines curiosos” que crecen por todas partes en las ciudades si uno se fija, pues la naturaleza siempre se abre paso por dónde puede y sobre todo en los lugares que nosotros hemos abandonado. Nosotros siempre nos acordamos de este libro cuando descubrimos algún “jardín curioso”.
2. La señorita Emilia de Bárbara Cooney, ediciones Ekaré.
Es ya un álbum ilustrado clásico. La señorita Emilia ha viajado por todo el mundo, se ha comprado una casa al lado del mar, pero aún le falta algo por hacer, algo que prometió a su abuelo de pequeña: hacer del mundo un lugar más bello. Como
Decide plantar el jardín de la casa que se acaba de comprar con las semillas de lupino que trajo de uno de sus viajes. Después del invierno su jardín crece precioso y para su sorpresa descubre que en una colina cercana también han florecido los lupinos, probablemente porque el viento o los pájaros arrastraron las semillas desde su jardín hasta allí.
Eso le dio una idea a la señorita Emilia: esparcir ella misma las semillas para hacer del mundo un lugar más bonito.
Y está claro que lo consiguió:
Desde que les conté este cuento mis hijos se han aficionado a recoger semillas de las plantas que se van encontrando y a distribuirlas o replantarlas por zonas sin plantas, aunque también les he tenido que explicar por qué algunas especies se consideran invasoras y es mejor no favorecer su propagación.
3. La jardinera, de Sarah Stewart y David Small, ediciones Ekaré.
Es la historia de una niña que vive en el campo y comparte con su abuela una gran pasión por las flores, las plantas y la jardinería. Sin embargo, la mala situación económica de su familia la obligará a marcharse lejos, a la ciudad, gris y vacía de plantas, para vivir con su malhumorado tío.
La niña, lejos de hundirse por las circunstancias adversas, encontrará un pequeño rinconcito donde sembrar las semillas que su abuela le va mandando y, de paso, hacer la vida en la ciudad un poquito más colorista y feliz.
Una bonita historia sobre nuestra capacidad de mejorar nuestro entorno a través de pequeños gestos.
Después de leer este libro, por supuesto, nos podemos dedicar a hacer algunas labores de jardinería en cualquier pequeño rincón que tengamos en una terraza, un balcón o una ventana. A los niños siempre les encanta, aunque hay que tener mucha paciencia porque tiran la tierra, manchan, se mojan con el agua de regar, en fin… Aunque sólo sea alguna macetilla con una planta aromática como el perejil para utilizar en la cocina.
4. La sorpresa del jardinero, de Carla Balzaretti y Sonja Wimmer, editorial Cuento de Luz.
Es la historia de un mecánico de profesión cuya verdadera vocación es la jardinería.En sus ratos libres se dedica a cuidar un montón de flores que apenas caben en su pequeño piso. Sueña con tener una casa grande con grandes extensiones de jardín donde dar rienda suelta a su amor por las plantas.
Un día ve su sueño al alcance de su mano, pues le ofrecen un trabajo bien pagado con una casa como la de sus sueños. Pero su felicidad durará poco, pues su nuevo trabajo de mecánico consiste en poner a punto los aviones que lanzan misiles. No se ve capaz de llevar a cabo semejante misión pero, ahora bien, antes de abandonar el trabajo, el protagonista se reservará una última decisión personal, la sorpresa del jardinero, un “pequeño cambio” en el cargamento de los aviones:
Otros libros que tengo pendientes y que bien pudieran estar relacionados con esta temática son los siguientes. No puedo dar una opinión porque ni los he leído y ni siquiera los he ojeado, aunque por la sinopsis y la portada me parece que pueden estar bien:
todo precioso, y en especial para diferentes edades es lo más importante, podemos seleccionar y trabajar por proteger el medio ambiente, estas actividades las realizamos en nuestras bibliotecas
Muchas gracias por tu lindo artículo 😉